El calco de la epoca del corrupto y chorro de Menen ahora del coimero Milei: Ramal que para, ramal que cierra adiós al tren a Bahía Blanca

La política de desguace del sistema ferroviario que lleva adelante el gobierno nacional ya provocó al pérdida de mas de 3 mil puestos de trabajo y dejó a decenas de miles de personas sin conectividad

El ramal ferroviario que unía Buenos Aires con Bahía Blanca fue suspendido de manera definitiva por el gobierno nacional, y con esa medida ya son doce las líneas de pasajeros de media y larga distancia que dejaron de funcionar desde la llegada de Javier Milei al gobierno en diciembre de 2023.

Como en la década del 90, el proyecto de desguace y entrega de los ferrocarriles argentinos por parte del gobierno nacional está en marcha y se acelera día a día, eliminando estaciones, limitando servicios y preparando el terreno para una eventual privatización a precios irrisorios y bajo condiciones seguramente ruinosas para el Estado nacional.

La línea a Bahía Blanca ya había dejado de funcionar en marzo de 2023, a pesar de que era utilizada habitualmente por vecinos de varios distritos del sur bonaerense para conectarse de manera directa y económica con la Capital Federal. Ahora, la novedad es el cierre definitivo de la estación Sur de Bahía, que, al estar reconocida como edificio histórico, quedó bajo la custodia de la Policía Federal.

Con la baja del servicio, diecisiete trabajadores quedaron en la calle y se suman a los cientos de despidos en el sector ferroviario que se vienen produciendo en el marco de la “Emergencia Ferroviaria” decretada por Milei en 2024. Esta norma le otorga al Ejecutivo discrecionalidad absoluta para la suspensión, cierre y vaciamiento de ramales, talleres y vías bajo el argumento de un supuesto “deterioro de la infraestructura”. A pesar de ello, uno de los primeros ramales en cerrar fue el que unía Retiro con la estación de Palmira, en la provincia de San Luis, reinaugurado en 2023 en condiciones óptimas de funcionamiento.

Uno por uno, los ramales que ya cerró Milei

Además del tren que unía CABA con Bahía Blanca y la línea que llegaba hasta San Luis, el ejecutivo nacional ya cerró de forma definitiva otros 9 ramales. El servicio expreso entre Buenos Aires y Rosario, que había sido implementado a fines de 2022, fue suprimido sin que mediara una explicación oficial en mayo de 2024. Se trataba de un tren que operaba únicamente los fines de semana, reforzando las prestaciones del corredor y tardando menos de cinco horas en unir ambos destinos.

También fue suspendido el servicio turístico Mercedes – Tomás Jofré de la línea Belgrano Sur, inaugurado en 2023. Trenes Argentinos decidió interrumpirlo en mayo de 2024 tras un accidente ocurrido ese mes, cuando un camión colisionó contra el puente del ramal G del Ferrocarril Belgrano sobre la ruta 41, en Mercedes, provocando su derrumbe.

Otro servicio que detuvo su marcha sin fecha de regreso fue el tren de pasajeros entre Buenos Aires y Pehuajó, rehabilitado en 2022 y paralizado en noviembre. Según Trenes Argentinos, los motivos fueron el “tiempo prolongado de viaje y demoras”, además de una baja demanda en los últimos meses.

El tren regional La Banda – Fernández, inaugurado en 2022, también dejó de correr el 1 de noviembre. Contaba con dos frecuencias diarias por sentido, pero fue dado de baja debido al “bajo factor de ocupación, que no superaba el 38% en promedio”, y a los “costos de mantenimiento de la formación”. La empresa argumentó que la medida permitiría “un ahorro de 27 millones de pesos mensuales”.

El tren Rosario – Cañada de Gómez lleva medio año fuera de servicio, luego de que se suspendiera el 20 de noviembre de 2024. La única formación asignada al recorrido sufrió un accidente sin pasajeros, y Trenes Argentinos Operaciones había condicionado la reanudación a la reparación de los coches, algo que hasta el momento no ocurrió.

Finalmente, el servicio entre General Guido y Pinamar fue interrumpido en abril pasado por “cuestiones de seguridad”. Se trataba de la segunda traza del trayecto que conecta CABA con Pinamar, que obliga a un trasbordo en Guido: allí, los pasajeros que viajan hacia la costa deben cambiar de tren para recorrer los 92 kilómetros restantes hasta la ciudad balnearia.

Miles de puestos de trabajo perdidos

El cierre de la empresa Trenes Argentinos, que actualmente funciona de forma residual, representó la cesantía de casi 1.400 empleados, entre trabajadores de la administración central, empleados de las estaciones, personal de mantenimiento y hasta guardabarreras, figura que todavía sigue siendo central en algunos pueblos del interior.

Además, en mayo de este año, sin que se confirmara oficialmente la cifra, se estima que hubo por lo menos otros 1.900 despidos de personal de los talleres ferroviarios a lo largo y ancho del país. Esto implicó, como elemento central, la desaparición de algunos oficios específicos, tanto los vinculados al mantenimiento como al funcionamiento de determinadas maquinarias que ahora quedarán paralizadas, esperando ser vendidas como chatarra, tal como ocurrió al comienzo de la década menemista.

Es decir, que por ahora son al menos 3.200 los trabajadores que quedaron en la calle y decenas de miles los argentinos y argentinas que perdieron una vía de conectividad segura, económica y cercana, sin que exista un proyecto o alternativa de reemplazo. Por lo tanto, es esperable que, junto con esta medida, se repita el fenómeno de la multiplicación de pueblos fantasmas, al costado de las vías que ya no verán pasar más el tren.