La Cámara Federal de Comodoro Py confirmó el procesamiento del exmandatario Alberto Fernández en la investigación por la contratación de seguros durante su gestión. La resolución también alcanza al broker Héctor Martínez Sosa y a María Cantero. En paralelo, el expresidente volvió a apuntar con dureza contra Fabiola Yañez por la denuncia de violencia de género.
La Cámara Federal de Comodoro Py ratificó este martes el procesamiento del exjefe de Estado Alberto Fernández en la causa por presuntas irregularidades en la contratación de seguros durante su administración. Con esa decisión, el expresidente quedó formalmente en condiciones de enfrentar un juicio oral y público.
El fallo de la Sala II también validó la situación procesal del broker Héctor Martínez Sosa, un hombre de estrecho vínculo personal con Fernández, y de su esposa, María Cantero, quien ofició como secretaria privada del entonces mandatario. Ambos están señalados en la trama que investiga posibles maniobras indebidas en la intermediación de seguros contratados por organismos estatales.
En este expediente se analizan negociaciones que, según la investigación, habrían beneficiado a figuras cercanas al círculo presidencial de aquel momento. La Cámara dio así un nuevo aval judicial a la acusación y dejó a todos los imputados más cerca de llegar a un debate oral.
Mientras la causa avanza, Fernández volvió a meterse de lleno en otra disputa que también lo tiene como protagonista: el juicio por violencia de género iniciado por Fabiola Yañez, su expareja. El expresidente negó de manera tajante las acusaciones y afirmó que saldrá absuelto porque, según remarcó, “todo es una gran mentira”. Reiteró además que la denuncia es, a su entender, “falsa” y que sólo prosperó “porque hubo un juez indecente como Ercolini”.
En esa misma línea, calificó el proceso como “un calvario” y cuestionó públicamente el estado emocional de Yañez. Aseguró que la ex primera dama arrastra “un problema de mucho tiempo” y que prefiere no profundizar “por prudencia”. También negó cualquier intención de disputar la custodia de su hijo Francisco y tildó de “ridiculez absoluta” las versiones en ese sentido.
Fernández insistió en que “todo lo que dice es mentira” y vinculó la denuncia a un reclamo económico, al afirmar que “siempre termina con que quiere un departamento”. Volvió a negar haber ejercido violencia física y sostuvo que la foto de Yañez con el ojo morado se debió a “una intervención plástica que le generó un derrame”. Según relató, ella habría dicho inicialmente que el golpe fue accidental para no admitir el tratamiento estético.
En los últimos días, Yañez ratificó públicamente su postura y aseguró que el moretón en el ojo fue consecuencia de un golpe del expresidente, incluso frente a un médico del entorno oficial. También afirmó que atravesó situaciones de manipulación y humillaciones que, según dijo, se repiten en casos de violencia psicológica.
En medio del cruce, Fernández deslizó que escuchó en los medios que su expareja habría cobrado “200 mil dólares por dar reportajes” y dejó una chicana al sugerir que, si eso fuera cierto, “estará lavando dinero en algún lado”. Aclaró, de todos modos, que cumple con lo dispuesto judicialmente en materia de alimentos para su hijo.
Con el procesamiento confirmado y una disputa personal que escala día a día, el escenario judicial del expresidente se vuelve cada vez más espeso, entre un expediente por corrupción que ya camina hacia el juicio y una denuncia por violencia de género que sigue generando tensiones públicas.